Áureos cabellos
en la espuma
de mi mar de plata.
Espadas surcan los rayos de oro.
Bosteza el Sol en el claro azul
de los incendiados días.
El anaranjado disco
el vuelo levanta
tras la argéntea ola.
El cielo enmarcado
muestra la pintura
real y estalla la gota de agua
en el desierto de la sorpresa.
Rayos de Sol en rayos de Luna,
en mi noble cumbre,
pintó la noche moruna.
El vigor se vistió de misterio.
El día fue noche clandestina.
La lucha, ternura.
Sonríe feliz la diosa de la noche,
con sus finas manos de algodón
alborota complaciente mi pelo albo.
La claridad de su luz
me embriaga de amor.
Sus ojos de lapislázuli
colorean mis pupilas.
Sus labios templados
besan mis sienes y cual gotitas
de agua, se deslizan
al manantial donde manan los te quiero.
Los vientos del corazón
lían nuestras hebras nacaradas
en la esencia de la noche,
donde las ninfas entonan
canciones en los velos del alma.
RAYOS DE SOL EN RAYOS DE LUNA(c) Antonio Portillo Casado
(Del poemario Vientos del Verso):
https://www.esstudioediciones.com/libros/69/vientos-del-verso.html